Bienvenida

Deseo que cada mujer que lea éste blog eleve su autoestima y sepa que puede escribir su propio cuento, no se si con príncipe azul, pero sí con un final feliz.

“ ‘Ser felices para siempre’ no es algo que encontramos sólo en los cuentos de hadas. ¡Ustedes pueden tenerlo!... Pero deben seguir el mapa del [Señor]” (Dieter Uchtdorf, 2010)

jueves, 8 de marzo de 2012

Cuando conocí la iglesia verdadera de Jesucristo

Subject: Mi conversion al evangelio

Date: Mon Aug 18, 2003 8:51:12 PM

From: Bessy

To: Joshua

Bueno mi príncipe, aquí le va mi historia de cuando no era miembro de la iglesia y de cómo la conocí.

Yo no era muy buena que digamos, no era muy obediente con mi mamá; y mi papá, pues... ya sabíamos lo mal que nos iba si no obedecíamos, así que con él era diferente. También hice muchas cosas malas de adolescente y lo peor es que las hacia por mi misma no porque otros me presionaban. Se que no fueron cosas livianas, porque tenía que arrepentirme de verdad, pero pude bautizarme y con los años como bien sabe, ir al templo, así que eso demuestra que estoy arrepentida. No me da nada de orgullo decirle estas cosas, pero le soy sincera para que me conozca de verdad desde ahorita. Espero que no se decepcione de mi, pero si así pasa por lo menos será antes de que venga a Honduras y le ahorro un viaje.

Bueno, yo me bauticé a los 14 años, el 25 de febrero de 1996, ese mismo día se bautizaron mis dos hermanos mayores, Carlos (16) y Francis(15).

Antes de ser miembros, Carlos y yo siempre andábamos justos, con sus amigos, *éramos un grupo, bueno, era el tiempo en que apenas empezaban a formarse grupos para hacer solo “travesuras”, pero después con los años ya se convirtió eso en pandillas y a hacer cosas realmente malas. Al principio era todo divertido, íbamos a lugares a aventurar, pero como le digo, luego empezaron a ponerse de moda los tatuajes, y robar por diversión, luego drogas... así que mi hermano y yo nos empezamos a alejar de ellos. *Nos entró a mis dos hermanos y a mi ese enorme deseo de saber más sobre Dios, empezamos a ir muchas diferentes iglesias los tres juntos, nuestros amigos de ese grupo se empezaron a burlaban de nosotros porque íbamos a las iglesias y porque no participábamos de sus “diversiones”, pero sabíamos sin duda que en el fondo nos admiraban por tener el valor de decir ¡no! cuando ellos no tenían esa misma fuerza de voluntad. Recuerdo que el saber eso que ellos sentían en su interior nos dio la fuerza para negarnos y no sentirnos avergonzados ante ellos. Sí se burlaban y empezaban a decirnos “tontos”, y que “solo era una vez” o “un poquito nada más” y todas esas cosas, Sí nos daba pena a veces, pero para nosotros era obvio que esas cosas eran malas y que los “tontos” eran ellos. Así no influyeron mucho; bueno, mi hermano sí logró hacerse un tatuaje pequeño en el brazo, donde mi papá no lo viera. *Pero le puedo asegurar que eso es algo de lo que él se arrepintió toda su vida, al grado de que se lo quitó y fue super doloroso haber hecho eso. Después de bautizarnos y de él querer ser un misionero, sintió el gran remordimiento, y una gran culpa y vergüenza con el Señor, y me decía que quería quitárselo, pero algunos lideres en la iglesia le decían que si estaba de verdad arrepentido el Señor ya lo había perdonado. Pero él no se sentía bien y me comentó un día que se lo iba a quitar, lo hizo y luego me contó lo extremadamente doloroso que eso fue, porque le quemaron la piel para poder borrar la tinta y le quedó una horrible e inflamada cicatriz.

Amábamos a nuestros amigos del grupo, éramos como hermanos, pero poco a poco nos tuvimos que apartar de ellos porque veíamos el mal camino que estaban llevando. Unos 4 de nuestros amigos fueron muertos por pleitos de pandillas en momentos diferentes pero por la misma razón, fue doloroso para cada uno de nosotros pero podíamos reconocer que esas eran las consecuencias de sus malas decisiones.

Un día llego mi hermano contando que había conocido a una muchacha (Karen Arevalo) que era “mormona” y que lo llevó a él y a otros jóvenes a la iglesia de ella y los invito a que recibieran a los misioneros en sus casas. Mi hermano aceptó por pena. Cuando nos contó que los misioneros iban a llegar a la casa empezamos a molestarlo y a burlarnos de él. *Aun cuando estábamos buscando a Dios y asistíamos a muchas diferentes religiones, de alguna manera estábamos seguros que cualquier iglesia podía ser la verdadera iglesia de Dios menos la iglesia de los “mormones”, nunca habíamos hablado con misioneros ni con un “mormón”, no sabíamos nada de ellos, solo que se “creían” la iglesia verdadera, entre otras cosas. Nosotros orábamos mucho pidiéndole a Dios que nos guiara a la iglesia verdadera. Recuerdo muy claramente que un día estábamos en el cuarto acostados mi hermana, mi hermano y yo, todos mis 5 hermanos y yo dormíamos en un solo cuarto y habían tres camas que nos compartíamos los 6, esa noche los tres nos pusimos a hablar sobre Dios y compartimos la opinión de que tenía que haber una iglesia verdadera, pero no sabíamos cuál era, fuimos a varias y aun cuando nos sentíamos bien, había algo que no nos llenaba, teníamos un vacío y dudas; nos acostamos muy tarde haciéndonos preguntas sobre Dios y cómo fue que existimos nosotros y el universo, qué pasaba después de morir, etc., analizamos cada religión y estábamos seguros que no estaban completas, porque no contestaban esas preguntas que teníamos. Recuerdo que esa noche uno de nosotros preguntó, ¿Y los mormones? Y rápidamente nos reímos y dijimos que obviamente no era la iglesia verdadera, que aunque habíamos asistido a todas las religiones, menos a esa, no necesitábamos hacerlo porque no era la verdadera, no sabíamos por qué, pero eso pensábamos. Cuando por fin decidimos dejar de hablar y apagamos la luz, yo me puse a orar acostada y *le pedí a Dios que si había una iglesia verdadera que me escribiera el nombre en la pared con una luz brillante para poder leerlo bien (Ja ja ja), para mi gran decepción no pasó nada. No lo entendía, porque yo realmente había orado con fe, creyendo que iba a recibir una respuesta. Estoy segura que mis hermanos también en algún momento hicieron esa misma oración. Pero yo estaba esperando una manifestación equivocada, él realmente me contestó, no en ese mismo instante, con letras escritas en la pared, pero sí lo hizo poco después y de manera diferente...

Pocos días después, como respuesta nuestras oraciones y búsqueda de la verdad, fue que ésta amiga invitó a mi hermano a la iglesia de los “mormones”. Los misiones llegaron a la casa a visitar a mi hermano, estaban en la sala, y mi hermana y yo nos asomábamos por la puerta de la sala para hacerle cosas chistosas para hacer reír a mi hermano y nos burlamos de él, estando en eso uno de los misioneros nos vio y nos invitó a escuchar lo que le iban a enseñar a mi hermano, nosotros estábamos tan enojadas, pero por pena a decir que no, nos sentamos a escuchar. Cuando ellos empezaron a hablar del plan de Dios y a contestar todas aquellas preguntas que teníamos aquella noche, nos asombramos y en esa primera charla creíamos sin ninguna duda que absolutamente todo lo que nos decían era verdad. No teníamos duda de que era la iglesia verdadera. Nuestros amigos empezaron a burlarse de nosotros al saber que los misioneros nos estaban dando charlas, pero no les hicimos caso.

Seguimos recibiendo charlas hasta que vino la parte difícil, antes de bautizarnos alguien nos entrevistaba para saber si éramos dignos del bautismo o para confesar nuestros pecados... Yo ya lo había hecho en otra religión y tampoco fue fácil confesar todo lo malo que uno ha hecho, pero esta vez fue diferente, yo podía ver a los ojos a la persona a quién le estaba confesando mis cosas, podía sentir el amor que tenía hacia mi sin conocerme y aunque era más vergonzoso, tenía más confianza de hablar y desahogarme. Fue muy penoso pero cuando terminé sentí una enorme liberación y culpa claro, pero también liberada y arrepentida. Y al final no me mandaron a rezar y a pagar cierta cantidad de dinero para ser perdonada, como fue la primera vez en otra religión. Esta vez me hablaron claro de lo grave que es desobedecer a Dios o qué tan malos eran mis pecados, me explicaron sobre la dignidad y esforzarse por ser limpios y obedientes, me hablaron sobre la expiación de Jesucristo y su amor infinito, sobre que tenemos que demostrar arrepentimiento por medio de la oración, pero también al confesar nuestros pecados, tratar de remediar lo que se pueda remediar, y no volverlo a hacer.

Luego nos bautizamos los tres el mismo día, y recuerdo que al acostarnos ese día en la noche nos pusimos a platicar de lo que sentimos en el bautismo, y nos dijimos el uno al otro: ¿Sentiste eso? ¡Yo lo sentí! Los tres habíamos sentido el espíritu Santo que nos confirmó que lo que habíamos hecho era correcto. Nos sentíamos tan limpios, sin manchas, sin pecados, felices porque sabíamos que habíamos hecho algo bueno ante Dios y que por fin habíamos encontrado la iglesia verdadera, porque esta vez nos sentíamos completos, nada faltaba, nuestro corazón estaba lleno, el espíritu nos confirmó que era la única iglesia verdadera.

Cuando mi hermana y yo empezamos a usar faldas largas y mi hermano a usar camisa blanca formal de mangas largas y corbata, y el domingo caminar los tres hacia la capilla con El Libro de Mormón en la mano comenzaron burlas de los demás todo el camino. Pero nuestros amigos notaron un cambio en nosotros y con el tiempo dejaron de molestarnos y hasta 3 de ellos lograron bautizarse, no porque nosotros les hablamos del evangelio o los llevamos a los misioneros, no, pero lo importante es que se bautizaron.

Estoy muy agradecida por nuestra amiga Karen Arevalo, por el Elder Prophet, de EE UU y el Elder Centeno, de Guatemala que nos dieron una nueva vida y nos enseñaron la verdad.

Bueno mi ángel, ya le conté mucho.

No me enojo por ese beso que me mandó en la boca, al contrario, ¡SOÑARE CON ESE BESO ESTA NOCHE!

Lo amo.

*La influencia de los buenos y malos amigos, https://www.lds.org/bc/content/shared/content/spanish/pdf/language-materials/09403_spa.pdf?lang=spa

*Cuando tenemos un deseo de saber y creer http://www.lds.org/scriptures/bofm/alma/32.27?lang=spa#26

*Preguntar a Dios si algo es verdadero http://www.lds.org/scriptures/bofm/moro/10.4?lang=spa#3

*La promesa de nuestro profeta de que algún día se arrepentirán de haberse hecho un tatuaje, es muy cierta, lo vi en el remordimiento de mi hermano, Lean este artículo que habla sobre las consecuencias de hacerse un tatuaje y las limitaciones que puede tener. http://www.lds.org/liahona/2006/03/7?lang=spa&query=tatuajes

*Si desea tener respuesta a las mismas preguntas que mis hermanos y yo teníamos ¿De dónde venimos? ¿por qué estamos aquí? ¿A dónde iremos después de morir? ¿Qué pasará con nuestros seres queridos al final? etc. En este link encontrará las respuestas http://www.lds.org/plan/we-lived-with-god?lang=spa

*Por qué afirmamos que somos la iglesia verdadera de Jesucristo: http://www.lds.org/liahona/2011/08/32?lang=spa&query=testimonio+de+la+iglesia+verdadera

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tus comentarios son importantes, deja uno aquí